¿Cómo le damos salida a nuestro pensamiento, a nuestras ideas? ¿Cómo podemos racionalizar lo que sentimos y poder expresarlo? Podemos materializar una comunicación afectiva y con orientación a los demás. Buscar un equilibrio entre lo emocional y lo material, dar lo justo sin tener que fusionarnos con el otro o generar una dependencia. Que el necesitar dar se vuelva concreto y no se esfume ni quede en el aire, como aquel que se compromete con la idea de la paz pero no para de hacer guerra.
Es el momento para establecer límites que puedan diferenciarnos de los demás, que nos permitan construir una identidad propia y compasiva. Ver qué podemos brindar, cómo podemos llevar adelante aquello que anhelamos. Podemos empezar siendo justos, abarcativos y tratando de planificar nuestros proyectos hacia adelante de una manera inclusiva que contemple varios puntos de vista, que no mire el propio ombligo y pueda encuadrar al resto. Puede ser material, tratando de generar una mejora en lo terrenal/económico. Podemos complementarlo con el aprendizaje de algo que complemente nuestra cotidianeidad financiera o negocio, encontrarle el sentido y el para qué de nuestra construcción material.
Por otro lado, Venus, Marte y Plutón en Acuario nos vienen a marcar un terreno donde nos indica la importancia de no tomarnos todo este mundo material en pura estructura y/o postura cerrada en querer lograr nuestras ambiciones. Toda esta acción debe estar redirigida hacia un movimiento más libre. ¿Qué necesitamos hacer para sentirnos en libertad, sin tanta presión? ¿Cuánta importancia le estuvimos dando a lo material? ¿Pudimos lograr un equilibrio entre lo que debemos y lo que queremos hacer? Permitámonos ser un poco más creativos y poder manipular nuestra cotidianidad con cierta ligereza y expresión. Tengamos en cuenta motivaciones para construir en equipo, juntos para algo mejor.
Tratemos de cerrar y tener en cuenta nuestras heridas, aquella iniciativa que sirva también para poder apoyar a los demás y tenerlas presentes en este ciclo que se cierra. No nos sintamos incómodos si hay una presión externa o algún tema nuestro que nos impulse a actuar egoístamente, o en individualidad, o soledad. Demos flujo a esta energía para que se pueda consumar para el bienestar general.
Siempre es importante ver en dónde cae en nuestra carta para poder ver dónde podemos canalizar esta influyente energía!
